*La exmunícipe benefició a la empresa WPE Textil, empresa perteneciente al yucateco Carlos Eduardo Worbis Rosado, quien, al momento de su contratación en el ayuntamiento de Solidaridad, ya contaba con antecedentes por suplantar servicios
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*Dicho contubernio signado entre Beristain y la empresa yucateca, hasta el momento se desconoce, ya que se encuentra oculto el contrato, pero con eso tenemos claro al gran desvio de recurso que hizo para su bolsillo, ¿dónde está?
Redaccion/ Periodismo Sin Reserva
Playa del Carmen-. Resultan inverosímiles y absurdas las enormes cantidades de dinero que robó la exalcadesa de Solidaridad, Laura Esther Beristain Navarrete, actos que se volvieron su sello característico durante su gestión al frente del ayuntamiento entre los años 2018 y 2021.
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Y es que a poco menos de dos años de que Beristain Navarrete dejara el poder, la opacidad que manejó durante su periodo como alcaldesa, comienza a desvanecerse, y los tratos sucios y contubernios que estableció con otros proveedores a fines comienzan a salir a la luz.
Tal es el caso de la empresa WPE Textil, empresa dirigida por el expresidente del Consejo Coordinador Empresarial de Yucatán, Carlos Eduardo Worbis Rosado, a quien Laura Beristain entregó más de 20 millones de pesos para la adquisición de uniformes para el personal adscrito a la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, todo esto durante los primeros meses de su administración.
Sin embargo, cabe mencionar que, durante esa misma temporada, la empresa de Worbis Rosado era acusada de funcionar como una fachada para que la misma Secretaría de Seguridad Pública de Yucatán desviara recursos, actos que salieron a la luz en el contrato GEY-SSP-FASP-047/2021, en el cual se demostraba que dicha empresa suplantaba servicios.
Y es que, de acuerdo con el Registro Público de Comercio, la empresa WPE Textil, Sociedad de Responsabilidad Limitada de Capital Variable, está especializada en el confeccionamiento de uniformes y ropa en general, no obstante, de manera irónica, el comisario estatal la contrató para que le entregara cascos, bastones, máscaras antigás, guantes, y escudos, entre otros objetos de uso exclusivo del sector policíaco.
Por estos servicios, la empresa yucateca cobró la nada despreciable cantidad de 10 millones 981 mil 870.8º pesos, y se estableció que “los bienes objeto del presente instrumento cumplen con conceptos de gasto del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública de los Estados y del Distrito Federal (FASP) para el ejercicio fiscal 2021”.
Pese a este historial, la edil no tuvo empacho en contratarlo y darle más del doble de lo que le ofrecieron en el estado de Yucatán, pues de acuerdo con el contrato DPM/LP/ADQ/021/2021, Beristain Navarrete asignó a este empresario yucateco un presupuesto de $25,671,876.48 (Veinticinco millones seiscientos setenta y un mil ochocientos setenta y seis pesos con 48/100 M.N.), es decir, 15 millones de pesos más.
No obstante, dicho contubernio hasta la fecha permanece sin conocerse los detalles con respecto a precios por pieza u otras especificaciones, debido a que el contrato permanece oculto, dejando en claro el evidente desvío de recursos, mala práctica que caracterizó a la exalcaldesa, a quien no le importó desviar con la justicia.