Durante su gestión al frente de Tulum, la exalcaldesa Romalda Dzul Caamal realizó diversos atracos a las arcas municipales; sin embargo, una gran parte de estos fueron en complicidad de sus tres compinches de la corrupción
Como si de un “robo de película” se tratara, Romalda, junto a su tesorero, Santiago Pech, y su oficial mayor, Ismael Zubieta, signaban contratos millonarios con empresas “a modo”, para poder realizar sus desvíos
De acuerdo con el contrato MTU/OM/RP/ADQ/LPN/010/2018, fue para la adquisición de equipo de cómputo por más de un millón y medio de pesos, no obstante, dicho documento fue censurado por Karla Borges, encargada de la transparencia del ayuntamiento de Tulum en ese entonce
Tulum, Quintana Roo. – Durante su gestión al frente de Tulum, la expresidenta municipal Romalda Dzul Caamal realizó diversos atracos a las arcas municipales; sin embargo, muchos de estos robos fueron en complicidad de sus 3 compinches de confianza; su tesorero, Santiago Pech Cahuich; su oficial mayor, Omar Ismael Zubieta Arcique; y la directora de Transparencia Karla Borges Castillo.
Prueba de ello fue la adquisición de 80 equipos de cómputo para escritorio y 20 impresoras multifuncionales, las cuales la exedil consiguió por poco más de un millón y medio de pesos, no obstante, dentro del documento en el cual Romalda está entregando el recurso por las computadoras, este mantiene censurados puntos de vital importancia, como a quien se le entregó dicho beneficio.
Este contrato con número MTU/OM/RP/ADQ/LPN/010/2018 señala que se realizó una inversión de $1,563,680.00 (Un millón quinientos sesenta y tres mil seiscientos ochenta pesos 00/100 M.N.); sin embargo, al no tener un beneficiario, o estar censurado por la exalcaldesa (en el especial caso de este documento), estaríamos hablando de un evidente desvío de recursos a través de compras fantasma.
Estas computadoras las compró con un precio unitario de $15,400.00 pesos y por las impresoras $5,800.00 pesos, cada una.
El surtimiento y plazo de entrega fue en la dirección de recursos materiales del ayuntamiento de Tulum mediante un plazo comprendido del día 12 al día 17 de mayo del 2018, con 12 meses de garantía contra defectos en su fabricación.
Asimismo, dicho documento está signado por la exmunícipe, junto a sus dos principales cómplices, Pech Cahuich y Zubieta Arcique, y, para darle más credibilidad al documento, su entonces director de informática, Sergio Villaseñor Solorio, también firmó, involucrándose en esta red corrupta tejida por Romalda y sus allegados.
Cabe mencionar, que, al momento de buscar información con respecto a la entrega, y/o adquisición de los equipos de cómputo, o algo relacionado con respecto a este tema, la información es nula, dejando en claro el evidente desvío.
Y no es para menos, pues al final, este cuarteto sería vinculado a proceso, pues en conjunto realizaron una serie de “robos de película”, pues mientras el tesorero, oficial mayor y exalcaldesa se encargaban de usar prestanombres o empresas “a modo”, Borges Castillo, se encargaba de borrar las evidencias de los millonarios desvíos.
Actualmente, este cuarteto se encuentra completamente libre e impune, pues, a pesar de la vinculación a proceso, Romalda Dzul tiene el fuerte deseo de volver al poder, “esperanzada” en que los tulumenses no la juzguen por su pasado, y si por su relación con el difunto Marciano Dzul.
Con información de Sol Quintana Roo