*Ana Patricia Peralta de la Peña entrega, por adjudicación directa, el contrato SIRESOL-DG-CPS-O3-22 a Protección Ambiental Contenedores y +, por la renta de un trascabo por 6 millones 243 ml 428 pesos para basurero en desuso
*El resultado de que los contratos sean solamente pagos de favores políticos, ha llevado a una contingencia ambiental debido al nulo servicio que supuestamente deben prestar estas empresas a las que se les paga la basura más cara del país
Cancún.- La presidenta municipal de Benito Juárez, Ana Patricia Peralta de la Peña, fiel a las órdenes de vitalicio dirigente del partido Verde, Jorge Emilio González, entregó por asignación directa, a la empresa Protección Ambiental Contenedores y + S.A. de C.V., el contrato SIRESOL-DG-CPS-O3-22, por 6 millones 243 ml 428 pesos, para la renta de un trascabo en la parcela 1113 del basurero, para acomodar y movilizar los desechos, el detalle está en que este relleno sanitario está sellado completamente porque terminó su vida útil desde el 14 de abril de 2013.
Al no recibirse ni un kilogramo de basura de las mil 500 toneladas produce Cancún, 150 de Isla Mujeres y 25 de Puerto Morelos, no se hace necesario contratar permanentemente este servicio de Protección Ambiental Contenedores y + S.A. de C.V., ya que las acciones son nulas o mínimas para el mantenimiento en un espacio abandonado, a menos que simule acomodar basura fantasma. Y para colmo los vecinos aseguran que no ven ningún trascabo que realice labores en la zona.
En realidad, estos más de seis millones de pesos son entregados a esta empresa como parte de un gigantesco esquema de corrupción que se hace con el negocio de la basura y en la que participa la presidenta municipal Ana Patricia Peralta y Jorge Emilio González, para hacerse de todo el negociazo que va desde el ciclo de recolección, trasporte, depósito, tratamiento y destino final. Y todo es por millones de pesos, por ello se adjudican contratos millonarios de manera directa, es decir, sin que medie licitación alguna. Así se hace una alianza burda en la que logran ser juez y parte para que nadie cuestione la danza de la corrupción con de recursos que se asignan.
Casi a manera de burla, en el contrato SIRESOL-DG-CPS-O3-22 se anota que deben trabajar de sol a sol, se exige un operador y una larga lista de requerimientos tan excepcionales como ponerle aceite, líquido de freno, anticongelante o checar que las llantas estén bien calibradas.
Y con tantas inversiones, lo menos que se puede esperar es que se tenga un buen servicio, en un lugar con tantos ingresos que se conoce como el Dubai de la Península de Yucatán. Pues no, los recursos son para pagar favores, abultar los bolsillos de los políticos, pagar sus lujos o cometer actos ilícitos, ya que debido a que no se ha invertido en el mantenimiento del basurero, por estar en una situación desastrosa, se ha emitido oficialmente una emergencia ambiental provocada por el colapso de los basureros.
Vale recordar que esta parcela 1113 del basurero municipal, fue motivo de discordia porque se intentó reabrir para depositar la basura nuevamente sobre montañas de basura, al declararse emergencia ambiental por el colapso de la parcela 196, pero los habitantes de las regiones y colonias cercanas realizaron todo tipo de bloqueos e impidieron que se volvieran a depositar toneladas de desechos porque saben que no hay mantenimiento y no quieren volver a soportar el infierno de un basurero a cielo abierto. Es por eso que a pesar de estar “clausurada” por Protección Ambiental la parcela 196, se reabrió para llevar los desechos.
Lo que quedó claro, es que la declaración de contingencia ambiental fue un acto político correr a la empresa Promotora Inmobiliaria Majahual S.A. de C.V. (PIMSA), ligada al periódico Novedades, pero lo único que se logró fue encender la rabia social y ahora los pepenadores no han recibido ninguna compensación ni de la empresa ni del ayuntamiento.
Por lo pronto el trascabo del basurero, contratado por Ana Patricia, dormirá el sueño de los justos.
