Oaxaca.- La falta de insumos y agua potable para ofrecer alimentos y opción de aseo a más de 200 personas migrantes terminó por colapsar en apenas tres días, orillando al cierre al albergue que improvisó el gobierno de Oaxaca para reubicar a los extranjeros en tránsito que se habían establecido en las inmediaciones de la Central de Abasto.
Luego de protestas y bloqueos carreteros por parte de vecinos de colonias de la zona para denunciar la constante presencia de migrantes que pernoctaban en parques y camellones, y que incluso se tornaban hostiles para pedir dinero, el gobierno de Oaxaca abrió un albergue temporal en la Parroquia Felicitas y Perpetua, en Santa Lucia del Camino, municipio conurbado de la capital oaxaqueña.
Sin embargo, este espacio cerró sus puertas este sábado a sólo tres días, ante la incapacidad de atender las necesidades de los 200 migrantes albergados.
Juana Jiménez, una de las responsables del albergue, denunció que pese a que llevaron a los extranjeros, inicialmente ninguna institución proporcionó víveres, y de la presidencia municipal sólo se recibieron 50 colchonetas, por lo que no se les podía brindar siquiera alimentos.
Indicó que el albergue no era más que la casa parroquial y que se vieron en la necesidad de ya no recibir a más migrantes, dado que no contaban tampoco con agua potable para que pudieran darse un baño.
“Ya no recibimos a nadie porque se nos agrava la situación por no tener agua. Nos piden cobijas, nos piden colchonetas y no tenemos porque nadie nos ha traído nada”, denunció.
Ante dicha situación los encargados de la parroquia lanzaron un llamado a la ciudadanía a donar alimentos preparados, convocatoria a la que se sumó la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO), instancia que acompañó el traslado de los extranjeros.
Finalmente, este sábado la parroquia decidió cerrar sus puertas por dos razones, la primera porque la mayoría de los 200 migrantes continuarán su camino a la Ciudad de México, y sobre todo porque no pueden seguir recibiendo personas en tránsito, pues no cuentan con lo mínimo indispensable para brindar una ayuda humanitaria digna.
De acuerdo con datos del gobierno de Oaxaca, esta entidad se ha convertido prácticamente en paso obligado de miles de migrantes de al menos 16 países que buscan llegar a Estados Unidos y sólo de mayo al 15 de agosto, mes en el que se habilitó por segunda vez la entrega de permisos temporales en Tapanatepec, han cruzado por el suelo oaxaqueño 60 mil 280 personas en tránsito.