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Cancún-. Mientras Mara Lezama busca alternativas para presentar una candidatura de peso en Solidaridad, las ambiciones de algunos morenistas y verdes están armando un escenario que puede ser catastrófico para las aspiraciones de la gobernadora.
Por un lado, la Secretaria de Gobierno, Cristina Torres, ex panista y priísta, es aval para que Estefanía Mercado sea la candidata de la alianza morena-verde a la presidencia municipal de Solidaridad y por el otro la familia Beristaín, conscientes del desprestigio que tienen en Solidaridad, han armado y extenso equipo para lograr que Estefanía Mercado sea la candidata a la presidencia municipal en 2024.
Los Beristain han logrado que Mara Lezama les autorice nombramientos para muchos de los que les ayudaron a saquear las arcas municipales de Solidaridad entre 2018 y 2021; gente como Fiby Kantún Carranza, quien destacara como cerebro de la corrupción y extorsión en la Secretaría de Protección Civil, hoy es funcionaria de la Universidad Tecnológica de Riviera Maya, desde donde está armando grupos juveniles para apoyo a Estefanía Mercado, lo cual ha provocado problemas serios en el nivel académico de la escuela, así como bajas de alumnos y maestros que se niegan a convertir la institución educativa en un apéndice de morena.
Pero como los Beristaín saben muy bien que Solidaridad, gracias a sus excesos, es un territorio difícil de recuperar para morena, han reforzado su estrategia para posicionar a Estefanía Mercado como candidata a la presidencia municipal, por lo que en días recientes integraron a otra joya del saqueo a las arcas municipales durante la administración 2018-2021, a la ex directora del DIF municipal Mirella Díaz Aguilar, quien está implicada en al menos tres de las denuncias por corrupción, y además de actos de nepotismo al incluir en la nómina municipal a sus hermanos, César, Director Administrativo del Club Interplaya, su tío Rubén Aguilar, coordinador de Servicios Generales del DIF, Arturo Uranga, coordinador de Recreación, Cultura y Deporte, hermano de su cuñada Andrea Uranga, y a su esposo, Jorge Antonio Jiménez Flores, como contralor municipal de Solidaridad, quien no cubrió los requisitos legales para ocupar el cargo, pero que gracias a su cargo hoy se pasea por Playa del Carmen en un auto Mercedes Benz valuado en un millón y medio de pesos.
Las relaciones políticas y oscuras de la familia Beristaín lograron que Mirella Díaz fuera designada como suplente de Silvia Dzul Sánchez, actual diputada en la XVII Legislatura, pero los Beristaín fueron más allá y lograron que la gobernadora Mara Lezama nombrara a Mirella Díaz como representante del Instituto Quintanarroense de la Mujer en Solidaridad, cargo desde el cual la socia y cómplice del saqueo de las arcas municipales de Solidaridad se dedica a promover a la fallida candidata del partido verde, Estefanía Mercado, quien en sus presentaciones no lograr convencer a nadie ajeno a su equipo de trabajo.
Ante este panorama, la gobernadora Mara Lezama deberá ir pensando en buscar otra alternativa para presentar en la contienda electoral de Solidaridad, porque sus amigas Beristaín son garantía de rechazo social, las operadoras de los Beristaín también tienen el estigma de la corrupción a flor de piel, por lo que si está pensando en verde la posibilidad pueda ser para Cinthya Osorio, puesto que su esposo, Mauricio Góngora ya está armando la red para sacar de la jugada a morena en Solidaridad. Tiempo al tiempo