Chetumal, Quintana Roo. – En un claro acto de desdén hacia el gremio de taxistas, el IMOVEQROO, liderado por Rodrigo Alcázar Urrutia, persiste en su negativa y obstáculos para aprobar el merecido incremento de tarifas solicitado por el Sindicato de Taxistas de Othón P. Blanco, a pesar de que cumplieron con todos los requisitos en tiempo y forma.
Julio César Castilla Zapata, secretario general del SUCHAA, expresó su pesar ante la actitud obstinada de Alcázar Urrutia, señalando que el gremio ha esperado el ansiado aumento desde 2019.
Lamentablemente, el director del IMOVEQROO parece empeñado en perjudicar a los taxistas, ignorando las necesidades y el esfuerzo diario de quienes forman parte de este sector esencial.
En 2023, Alcázar justificó su inacción alegando que acababa de asumir el cargo debido al cambio de gobierno. Sin embargo, en el transcurso del año, su intención de perjudicar al gremio se hizo evidente, dejando claro que las promesas quedaron en el olvido.
La ironía de la situación es palpable, ya que mientras las autoridades se escudan en no afectar a los ciudadanos al negar el aumento, los taxistas, también son parte fundamental de la sociedad.
En medio de un panorama económico en constante alza, con incrementos en la canasta básica, salario mínimo, insumos, refacciones y combustible, resulta inconcebible que la única variable que no se ajusta sea la tarifa de los taxistas.
Esto solo se ve agravado por el deficiente desempeño de Rodrigo Alcázar al frente del IMOVEQROO, cuya gestión deja mucho que desear, afectando directamente a quienes dependen de una tarifa justa para subsistir. Ante esta situación, se anticipan manifestaciones y amparos por parte de los transportistas en los próximos días.
